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LA VERDAD DE ALBACETE, 25 ANIVERSARIO DE SCOUTS DE CASTILLA LA MANCHA, ASDE
Antonio Alaminos - Castor Precavido 09/12/2008 09:55:04Albacete
La aventura de convivir
El Grupo Scouts de Castilla-La Mancha cumple en 2009 su 25 aniversario
Fuente: Diario La Verdad (Vocento) Edic de Albacete. 09.12.08
ISABEL MARTÍNEZ
ALBACETE
La aventura de convivir
Más de 700 niños de la provincia practican Escultismo. /LV
«Las actividades que hacemos se programan con objetivos pedagógicos y educativos»
La educación en valores relacionados con «la amistad, la responsabilidad o el respeto al medio ambiente» son la base de un movimiento que en 2007 cumplió 100 años. Esta región, en 2009 , conmemora el 25 aniversario del Grupo Scouts de Castilla-La Mancha. Más de 12.000 castellano-manchegos han formado parte a lo largo de este periodo de estas agrupaciones. El presidente de esta organización desde hace seis años , Raúl Munera, reconoce que la historia de «esta ONG», como la califica, está en España inevitablemente ligada a su devenir político, aunque su origen primitivo es británico. «El primer grupo de scouts del que tenemos constancia en esta comunidad es uno en Almadén (Ciudad Real) allá por el año 1912».
Pasará algún tiempo hasta que en 1929 se funden los scouts en Albacete que «se mantendrán activos hasta la Guerra Civil», como indica Raúl Munera. Con la dictadura se diluyó, como tantas otras cosas, pero, sin embargo, pasados los años y con la democracia restaurada, los Scouts de Castilla-La Mancha «nacen al tiempo que la nueva estructura autonómica de España».
Un total de ocho grupos en la capital, «otro en Hellín y uno más en Caudete» constituyen el mapa logístico de esta organización que cuenta con un «total de 700 niños y jóvenes y más de 234 monitores» en la provincia de Albacete. Aunque la cifra asciende a 1.200 a nivel regional.
En la actualidad están preparando diferentes actividades de cara a su 25 aniversario tanto a nivel local como autonómico. El presidente del movimiento en Castilla-La Mancha explica que se llevarán a cabo una gran variedad de iniciativas: «Una exposición sobre los 25 años de escultismo en la región, una cena de gala, así como el XXII Certamen Joven de la Canción Scout, que será la actividad estrella». Además, todos estos proyectos y otros, aún en proceso, estarán complementados por la implantación de la nueva imagen corporativa de la Federación. No obstante, el resto del año también se desarrollan diferentes proyectos con las que se pretende «educar en el tiempo libre». Raúl Munera sostiene que estas actividades «se basan en las reuniones de los sábados y en los campamentos». También recuerda que todas las iniciativas «están programadas con objetivos pedagógicos y educativos». Las nuevas tecnologías así como la gran variedad de actividades de ocio y tiempo libre que sacuden continuamente a niños y jóvenes, se han convertido en duros contrincantes para las formaciones de scouts que apuestan por las relaciones humanas donde los videojuegos, por poner un ejemplo, sólo ofrecen muñecos en 3D y ficción.
En esa línea, el relevo generacional, con todas las connotaciones que eso implica, tampoco favorece, a priori, el desarrollo de formaciones como esta en las que se apuesta por «el compromiso con la realidad». Sin embargo, Raúl Munera se muestra optimista y sostiene que aunque «las nuevas tecnologías implican nuevas alternativas, los scouts son algo más».
Convivencia y naturaleza
Su metodología se basa en «la convivencia entre chavales» y desde «esta ONG con carácter educativo» se defiende que el contacto entre los niños y jóvenes que la componen es fundamental: «El ser humano, por naturaleza, necesita de los demás para crecer en todos los aspectos». Esta visión sensata y entusiasta permite al presidente de la organización asegurar que «otros 25 años son posibles».
Además, matiza: «El escultismo es un movimiento que avanza con la sociedad a la que sirve y los padres y madres del mañana seguirán viendo en estos grupos un lugar donde sus hijos aprenderán a ser buenas personas». Son numerosas las voces que sostienen que los scouts son formaciones con cierto carácter militar, donde se dan ordenes que en breve son obedecidas. Sin embargo, la realidad descrita por Raúl, fruto de su experiencia, refleja otra perspectiva. De hecho, en 2007 el Grupo Scouts de Castilla-La Mancha recibió la mención honorífica a la labor voluntaria del Gobierno Regional y en 2008 fue distinguido como entidad de utilidad pública por el Gobierno de España.
Diferentes reconocimientos que les motivan para continuar formando parte, de una u otra forma, de este proyecto que se asienta en el pasado pero que mira con expectación al futuro.
No hay un perfil
No se necesitan unos requisitos específicos para formar parte de los Scouts. De hecho su presidente en esta comunidad autónoma asegura que «no existe un perfil concreto». En cualquier caso, es necesario que los niños tengan más de 6 años y menos de 21, aunque a partir de los 18 pueden pasar a ser monitores. Las personas que forman parte de estos proyectos pagan unas cuotas anuales que varían entre los 90 y los 140 euros.
En esa línea, Raúl Munera sostiene que lo único que tienen en común todos los miembros de esta organización es «el compromiso con la sociedad, la disponibilidad para mejorar su entorno y la lucha por causas que consideran justas». Tres puntos sobres los que se trabaja en cada campamento, reunión o actividad. Una labor voluntaria y desinteresada que no sería posible, según reconoce el presidente, sin la labor de los voluntarios.
La aventura de convivir
El Grupo Scouts de Castilla-La Mancha cumple en 2009 su 25 aniversario
Fuente: Diario La Verdad (Vocento) Edic de Albacete. 09.12.08
ISABEL MARTÍNEZ
ALBACETE
La aventura de convivir
Más de 700 niños de la provincia practican Escultismo. /LV
«Las actividades que hacemos se programan con objetivos pedagógicos y educativos»
La educación en valores relacionados con «la amistad, la responsabilidad o el respeto al medio ambiente» son la base de un movimiento que en 2007 cumplió 100 años. Esta región, en 2009 , conmemora el 25 aniversario del Grupo Scouts de Castilla-La Mancha. Más de 12.000 castellano-manchegos han formado parte a lo largo de este periodo de estas agrupaciones. El presidente de esta organización desde hace seis años , Raúl Munera, reconoce que la historia de «esta ONG», como la califica, está en España inevitablemente ligada a su devenir político, aunque su origen primitivo es británico. «El primer grupo de scouts del que tenemos constancia en esta comunidad es uno en Almadén (Ciudad Real) allá por el año 1912».
Pasará algún tiempo hasta que en 1929 se funden los scouts en Albacete que «se mantendrán activos hasta la Guerra Civil», como indica Raúl Munera. Con la dictadura se diluyó, como tantas otras cosas, pero, sin embargo, pasados los años y con la democracia restaurada, los Scouts de Castilla-La Mancha «nacen al tiempo que la nueva estructura autonómica de España».
Un total de ocho grupos en la capital, «otro en Hellín y uno más en Caudete» constituyen el mapa logístico de esta organización que cuenta con un «total de 700 niños y jóvenes y más de 234 monitores» en la provincia de Albacete. Aunque la cifra asciende a 1.200 a nivel regional.
En la actualidad están preparando diferentes actividades de cara a su 25 aniversario tanto a nivel local como autonómico. El presidente del movimiento en Castilla-La Mancha explica que se llevarán a cabo una gran variedad de iniciativas: «Una exposición sobre los 25 años de escultismo en la región, una cena de gala, así como el XXII Certamen Joven de la Canción Scout, que será la actividad estrella». Además, todos estos proyectos y otros, aún en proceso, estarán complementados por la implantación de la nueva imagen corporativa de la Federación. No obstante, el resto del año también se desarrollan diferentes proyectos con las que se pretende «educar en el tiempo libre». Raúl Munera sostiene que estas actividades «se basan en las reuniones de los sábados y en los campamentos». También recuerda que todas las iniciativas «están programadas con objetivos pedagógicos y educativos». Las nuevas tecnologías así como la gran variedad de actividades de ocio y tiempo libre que sacuden continuamente a niños y jóvenes, se han convertido en duros contrincantes para las formaciones de scouts que apuestan por las relaciones humanas donde los videojuegos, por poner un ejemplo, sólo ofrecen muñecos en 3D y ficción.
En esa línea, el relevo generacional, con todas las connotaciones que eso implica, tampoco favorece, a priori, el desarrollo de formaciones como esta en las que se apuesta por «el compromiso con la realidad». Sin embargo, Raúl Munera se muestra optimista y sostiene que aunque «las nuevas tecnologías implican nuevas alternativas, los scouts son algo más».
Convivencia y naturaleza
Su metodología se basa en «la convivencia entre chavales» y desde «esta ONG con carácter educativo» se defiende que el contacto entre los niños y jóvenes que la componen es fundamental: «El ser humano, por naturaleza, necesita de los demás para crecer en todos los aspectos». Esta visión sensata y entusiasta permite al presidente de la organización asegurar que «otros 25 años son posibles».
Además, matiza: «El escultismo es un movimiento que avanza con la sociedad a la que sirve y los padres y madres del mañana seguirán viendo en estos grupos un lugar donde sus hijos aprenderán a ser buenas personas». Son numerosas las voces que sostienen que los scouts son formaciones con cierto carácter militar, donde se dan ordenes que en breve son obedecidas. Sin embargo, la realidad descrita por Raúl, fruto de su experiencia, refleja otra perspectiva. De hecho, en 2007 el Grupo Scouts de Castilla-La Mancha recibió la mención honorífica a la labor voluntaria del Gobierno Regional y en 2008 fue distinguido como entidad de utilidad pública por el Gobierno de España.
Diferentes reconocimientos que les motivan para continuar formando parte, de una u otra forma, de este proyecto que se asienta en el pasado pero que mira con expectación al futuro.
No hay un perfil
No se necesitan unos requisitos específicos para formar parte de los Scouts. De hecho su presidente en esta comunidad autónoma asegura que «no existe un perfil concreto». En cualquier caso, es necesario que los niños tengan más de 6 años y menos de 21, aunque a partir de los 18 pueden pasar a ser monitores. Las personas que forman parte de estos proyectos pagan unas cuotas anuales que varían entre los 90 y los 140 euros.
En esa línea, Raúl Munera sostiene que lo único que tienen en común todos los miembros de esta organización es «el compromiso con la sociedad, la disponibilidad para mejorar su entorno y la lucha por causas que consideran justas». Tres puntos sobres los que se trabaja en cada campamento, reunión o actividad. Una labor voluntaria y desinteresada que no sería posible, según reconoce el presidente, sin la labor de los voluntarios.